07 noviembre 2010

DUBITATIVO


Qué es lo que nos hace sentirnos impregnados,
de los momentos vividos, retrotrayéndonos
de manera singular a una virulencia de sentimientos
emocionales, infiltrados de un no sé qué especial
que nos permite revivir con igual sensación
esos estados de ánimo pasados…

Es como una convulsión interior con aceleración
de latidos y que nos eriza la piel y nos llena de
ansiedad y algún sollozo reprimido, porque quizá
fue el encuentro entre dicha y angustia, el placer
sintiendo el adiós, la sonrisa que surgió de la tristeza
o el desaliento de haber perdido lo hallado.

También el resurgir el reproche a aquello
que no supimos decidir de forma adecuada,
o el lamento de haberlo hecho tal cual fue
con sus consecuencias inesperadas.

Siguen siendo como la luna de las hojas caídas,
reflejos de luz en las sombras, o el pequeño
ruido en medio del silencio.

Marcelino Menéndez González

ENCUENTRO


Me he ido asomando a tu interior
a través de tus palabras y gestos,
que me han dado pareceres y sensaciones,
de lo que piensas y sientes.

Han surgido con una sencillez y una naturalidad
que han logrado el encuentro con lo grato
y lo sincero, con lo ameno y agradable de su tono,
abrazando todos los aspectos de lo que significa
el valor de una persona plena de matices
de lo humano y todo lo entrañable, que se puede ser.

Ha sido entonces, cuando yo he podido
desenterrar mis raíces y volcar mis vivencias,
animado por tu diálogo, resultando un encuentro
especial de convergencias y el inicio de una empatía
que ha nacido, con los matices más sinceros
de lo espontáneo.

Marcelino Menéndez González

LO QUE SIENTO Y LO QUE SOY


Lo que siento, sé que tú
puedes sentirlo también
a pesar de que, cuando me miras,
hay cosas que no ves…

Sin embargo, ¡yo quiero todo lo que eres!
y porque ahogas todo este miedo
que siento dentro, no puedo dejarte ir
porque, ya eres parte vital
en la esencia mía y todo lo que yo soy.

Marcelino Menéndez González

PREGUNTAS


¿Quién da el color a las flores?

y ¿quién el aroma?,
¿quién las llena de belleza uniendo
el asombro y el encanto?,
¿porqué cierran o abren sus pétalos
según la luz y el tiempo?
¿ y es que cobran alma cuando tú las miras?
¿porqué los campos dan flores sin que
nadie las haya cultivado?.

¿Es que para escribir se requiere un
idioma castizo y estudiado?...

Siempre las preguntas, las eternas preguntas

Marcelino Menéndez González

RECAPACITAR


Quiero dejar de huir de mi mismo
rechazando cosas que no siento
de lo que llevo conmigo.

Si bien cada uno guía su propio caminar
y lo realiza de acuerdo a su capacidad
de tiempo, espacio y movimiento,
- se hacen relativos- y muchas de las veces
no se acoplan a las circunstancias
de la verdadera realidad.

Y es cuando resulta necesario reflexionar
para no olvidar agradecer ,aceptar, compartir
y perdonar y, con todo ello, adaptarse
a lo bueno y a lo malo, a tener y no tener,
y saber ser y estar.

Aprender a crear la felicidad y para construirla
poco a poco, hacerlo transformando en positivo
todas las vivencias, dándoles sentido y forma
ya que lo que tiene forma y se puede definir, ¡existe!
y es cuando se pueden juntar el asombro y el encanto,
consumándose el sentido de la vida.

Marcelino Menéndez González