21 octubre 2014

UNA BELLA CONVERSIÓN

 Estoy viviendo una sensación muy peculiar
 y distinta a todo, que me va penetrando poco a poco,
 de forma paulatina e intangible pero,
 como si quisiera que no me diera cuenta,
 ocupando espacios internos y vacíos,
 llenándolos de su presencia.

 No es el aire, no es la luz; es algo abstracto
 que me va inundando de una fuerza especial,
 que me priva de cualquier reacción que intentara crear.

 Mi cuerpo y mis sentidos, me alertan de lo que ocurre
 y previenen cualquier posible desenlace;
 al final, todo se desencadena desde lo imprevisto
 y surge lo inesperado y es, cuando la belleza
 se convierte en interior…y entonces,
 ya nada vuelve a ser igual.

Marcelino Menéndez González

03 octubre 2014

LOS AÑOS VIVIDOS


Sin darme cuenta siguiera,
 empecé a sacudirme el polvo
 y me encontré con los años vividos.
 ¡cuántos! y que tan pocos…

 Imaginé el pasado y hallé tantos recuerdos,
 que me superaron; acudieron en tropel
 y de tal manera, que no fui capaz,
 de definirlos, cobrando importancia sólo algunos.

 Uno de ellos fue, cuando supe que era yo;
 recuerdo que sentí una emoción especial,
 que podía hacer cosas que pensaba nadie hiciera,
 que era parte de algo inmenso y se despertaban
 en mí, inquietudes de todo tipo. Me sentía libre,
 sin miedo, ante un mundo que me esperaba
 y al cual iba a pertenecer.

 Qué osadía y que utopía de entonces.
 hoy, después del tránsito recorrido en el tiempo,
 me doy cuenta cabal, que por mucho que se aprenda,
 poco se sabe de lo que hay que aprender, que el tiempo
 transcurre siempre igual, cada segundo, cada minuto,
 al mismo ritmo y la vida de igual compás, pero,
 cuántas veces queremos acelerarla, cambiarla y que pase
 más de prisa, sin lograrlo nunca.

 Hemos perdido en esa vivencia muchas cosas, irrecuperables;
 vivir momentos felices insignificantes que pasaron a nuestro lado,
 sin apenas darnos cuenta, no disfrutar de cosas que pensábamos
 iban a repetirse y no fue así y un sin fin de hechos a los que
 nunca dimos la más mínima importancia, que hoy la tienen.

 En fin, se le atribuye lo de “es ley de vida” y nada más.
 acabé entonces por sacudirme el polvo y me encontré
 con lo que soy, con lo que pienso, con lo que siento y
 con lo que vivo, Yo.


 Marcelino Menéndez González

EN LA BRÚJULA DEL TIEMPO

 Tengo sed de muchas cosas,
 ansias de algunas más
 y sueños que no se agotan.

 Y aunque he podido apagar
 el fuego de muchas inquietudes,
 sin embargo pervive aún en la memoria,
 un algo aún no logrado.

 He encontrado muchas respuestas,
 pero me falta la que me haga sentir
 que he conseguido mi propósito…
 Sé que sabré cual será, aunque llegue
 en el último momento y me haga sentir,
 que no todo ha sido en vano.

Marcelino Menéndez González

DUBITATIVO


Qué es lo que nos hace sentirnos impregnados
 de los momentos vividos, retrotrayéndonos
 de manera singular a una virulencia de sentimientos
 emocionales, infiltrados de un no sé qué especial
 que nos permite revivir con igual sensación
 esos estados de ánimo pasados…

 Es como una convulsión interior con aceleración
 de latidos y que nos eriza la piel y nos llena de
 ansiedad y algún sollozo reprimido, porque quizá
 fue el encuentro entre dicha y angustia, el placer
 sintiendo el adiós, la sonrisa que surgió de la tristeza
 o el desaliento de haber perdido lo hallado.

 También el resurgir el reproche a aquello
 que no supimos decidir de forma adecuada,
 o el lamento de haberlo hecho tal cual fue
 con sus consecuencias inesperadas.

 Siguen siendo como reflejos de luz en las sombras,
 como la luna de las hojas caídas, o el pequeño
 ruido en medio del silencio…


Marcelino Menéndez González