24 agosto 2008

UN INSTANTE DE INSPIRACIÓN

Desposeídas de su aureola de lo inefable,
unas cuantas emociones quisieron erigirse
en sensaciones e invadieron para ello,
el espacio de un instante de inspiración.

Se introdujeron en él, moviéndose inquietas
como reflejos de luz iluminando sombras,
eludiendo la impaciencia de la prisa,
y se manifestaron como un manantial de vibraciones
de agua pura y cristalina, con los chasquidos
de su alegría por vivir, ocupando
la estancia incesante de ese breve tiempo,
convirtiéndola en una fuente de vida,
serena, tranquila y bella.

Marcelino Menéndez González

SOMBRA PENSATIVA

Con un leve contorno de claridad,
iba asomándose el amanecer
en el horizonte...

Absorto lo contemplaba como una invocación
en mi portal solitario, tratando de absorber
sus más bellos matices naturales.

Y con tu soledad en la mía, evoqué
los recuerdos, de aquellos momentos
que tanto disfrutamos y que hoy
sólo son melancolía.
Fui tuyo, fuiste mía, en una entrega
de plenitud de amor y fantasía,
en la que sólo nuestro mundo existía.

Hoy, sólo oscila el pasado balanceándose
en una constante sombra pensativa y,
según transcurre el tiempo, se agiganta
insondable e infinita...

Marcelino Menéndez González

SABIDURIA SIN SOMBRA

Leyendo las páginas del tiempo,
se tejen las hebras de la vida
en una urdimbre de matices diversos;
a veces en medio de una oscuridad eterna
surgiendo sólo luces fantasmales
y con la decepción hecha añicos,
como sombra agazapada sin la percepción
de un estímulo y sin conciencia de existir.

Y con sabiduría sin sombra, aprender
a reconducir el camino del pensamiento,
hacia tiempos sutiles, leyendo que llegan
atisbos felices y no permanecer, -como la castaña
escondida en la corteza de su erizo-,
aguardando la gran felicidad, sino vivir intensamente
las pequeñas alegrías, armonizándolas
como luces crepusculares, iluminando los alcores...

Marcelino Menéndez González

PROPÓSITOS


Por el camino de las horas vacías
en días vestidos de otro tiempo,
y sin separar la sombra del perfil,
encontré palabras escondidas por la prisa
y contemplé espejos que miran
y nos devuelven las imágenes que les damos,
alentando los ritmos del pasado.

Sin embargo, despierto ya de esa impaciencia
dormida, penetro bajo la piel de las cosas
en busca de su esencia y ya que hay vida
antes de la muerte, quiero vivirla, y quizá
perderme en mi propósito cerrando capítulos,
cerrando círculos, cerrando puertas,
-lo importante es poder cerrarlas- sabiendo eso sí,
cuando se acaba cada etapa de la vida y no
permanecer en ella mas allá del tiempo necesario.

¿Posibilidades de regreso?...a qué.
Marcelino Menéndez González

ELUCUBRACIONES


Lo tierno, lo tibio, lo tenue
de una mirada...

Lo trémulo, lo trivial, lo triste
de una sonrisa...

Como un gesto sin razón,
un gesto y...un nombre...

Y sólo con cierta perplejidad,
que no llega al asombro
me quedé esperando,
con imágenes color pastel
y la música de un vals...

Y como todas las cosas
en camino a alguna parte,
sin preguntar el ¡porqué!;
sabiendo eso sí, que a veces el reflejo
equivoca el color...

Al final todo quedó, como espejo astillado
en el suelo de los días.

Marcelino Menéndez González

CUANDO EL ATARDECER

Cuando el atardecer cobija gorriones,
cuando mi campo llora la
ausencia de espigas y lo invade
el frío y el hondo latido del silencio,
puedes si quieres, encontrarme ahí
en ese camino que une las distancias.

Y yo, acariciando la tierra
donde dejaré mis huellas
por si tú las recoges, estaré en el perfil
de una orilla ...esperando y latiendo
en soledad, donde el camino está
mientras la tarde cayendo va...

Marcelino Menéndez González