16 diciembre 2007

EN EL VÉRTICE DEL TIEMPO


Con un inmortal silencio
y el reposo de la luz,
el eterno tiempo con el velo
de las sombras, fue cerrando el postigo
donde ya nadie me espera,
ni a nadie espero.

Fue un momento indiferente
y, sin embargo, en el humo se quedaron
las palabras; humos blancos
que se alejaron, en la callada altura
de nuestra despedida…

Donde yo quedé, perdido en tu silencio
y tú, flotando en mi infinito;
y la esperanza en el vértice del tiempo…

Marcelino Menéndez González

1 comentario:

  1. Anónimo11:08 p. m.

    Por algo este trabajo mereció un premio de la Universidad Carlos III de Madrid. Mi felicitación mas
    sincera y real. Que sigas es cribiendo así. J.M.M.

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