Ignorando el porqué, he vuelto a sentir
lo que en ese momento determinado sentí.
Me encontré de repente envuelto por la noche,
las calles desiertas, y caía una ligera lluvia
que salpicaba de añoranza las farolas de luz,
surgiendo un eco lejano de una música que
identifiqué como “Extraños en la noche.”
Fue entonces cuando sentí y viví una
espesa y profunda soledad y las gotas de lluvia
se mezclaron en mis mejillas con lágrimas
de un llanto que surgía de mi interior,
acompañado de un gran dolor.
Ese momento se volvió eterno en el tiempo
porque ,estuvo lleno de pena y de una tristeza
única que me abrazó con desesperación; la razón
era que, ya no estabas tú…y no sabía donde encontrarte.
Supe que te habías ido para siempre
sin habérmelo podido decir y ello originó
que ésta vivencia se acrecentara en el transcurso
de los años, con la nostalgia de aquellos recuerdos
maravillosos vividos y que siguen formando parte
de mi vida y que de vez en cuando brotan -como ahora-
y lo hacen adornándose cada vez de mayor belleza,
aunque con la evocación de ese aciago día.
Marcelino Menéndez González
lo que en ese momento determinado sentí.
Me encontré de repente envuelto por la noche,
las calles desiertas, y caía una ligera lluvia
que salpicaba de añoranza las farolas de luz,
surgiendo un eco lejano de una música que
identifiqué como “Extraños en la noche.”
Fue entonces cuando sentí y viví una
espesa y profunda soledad y las gotas de lluvia
se mezclaron en mis mejillas con lágrimas
de un llanto que surgía de mi interior,
acompañado de un gran dolor.
Ese momento se volvió eterno en el tiempo
porque ,estuvo lleno de pena y de una tristeza
única que me abrazó con desesperación; la razón
era que, ya no estabas tú…y no sabía donde encontrarte.
Supe que te habías ido para siempre
sin habérmelo podido decir y ello originó
que ésta vivencia se acrecentara en el transcurso
de los años, con la nostalgia de aquellos recuerdos
maravillosos vividos y que siguen formando parte
de mi vida y que de vez en cuando brotan -como ahora-
y lo hacen adornándose cada vez de mayor belleza,
aunque con la evocación de ese aciago día.
Marcelino Menéndez González
La aceptación del presente y el recuerdo hermoso de lo vivido.
ResponderEliminarQuerido Poeta Marcelino siempre le acompañara un sentimiento júbiloso de aquel tiempo que tanto le conmueve.
QUE BONITO ESCRIBE, LE FELICITO.
Una sonrisa le envio, mis respetos y mi admiracion por usted
MªJosé