Sin meditarlo siquiera,
imaginé la inmensa gama de colores,
con sus matices y tonalidades
que existen en el cielo y en la naturaleza,
indescriptibles una gran mayoría;
y pensé que nunca aprecié junto a tu alma
ninguno de ellos…quizá porque eres
poseedora ¡del blanco puro de un mar de nieve!
Marcelino Menéndez González
No hay comentarios:
Publicar un comentario